El Colegio de Mediadores de Seguros recuerda que se considera corte de luz indemnizable cuando no exista suministro eléctrico durante más de tres minutos y no se trate de un apagón programado para mantenimiento

REDACCIÓN / ALBACETE
El Colegio de Mediadores de Seguros de Albacete recordó que se considera corte de luz indemnizable «cuando no exista suministro eléctrico durante más de tres minutos y no se trate de un apagón programado para realizar trabajos de mantenimiento en la red. Igualmente, se considera como daño eléctrico cualquier desperfecto que esté relacionado con un problema en el suministro de electricidad».

Además, añadió que el usuario tiene dos vías de indemnización y reclamación: a la empresa eléctrica y a la compañía de seguros. Por un lado, al suministrador eléctrico, hasta un máximo del 10% del importe de la factura anual. Por otro, la póliza de seguro Multirriesgo de Hogar suele contar con la cobertura de daños eléctricos.

Los mediadores de seguros reseñaron que sólo se puede reclamar si se tiene un seguro con una póliza de protección frente al daño y se está al día en el pago de las cuotas. Además, indicaron que el tomador del seguro debe comunicar lo sucedido a su aseguradora en un plazo de siete días para que el mediador traslade el siniestro a la compañía. Recomendaron también documentar bien los daños y aportar pruebas.

«En el caso de no ser considerado riesgo extraordinario, el Consorcio de Compensación de Seguros no se hará cargo de las pérdidas y, en ese caso, la indemnización recae en la compañía de seguros», reseñaron.

Por último, señalaron que si el apagón total que se produjo en la Península fuera considerado como catastrófico, «incluso podría entrar a indemnizar el Consorcio de Compensación de Seguros, siempre y cuando el usuario tenga una póliza de seguros en vigor».

Como consecuencia de los daños eléctricos, las neveras son las que presentan un mayor número de reclamaciones a los seguros en concepto de siniestro, seguidas por vitrocerámicas y televisores. También son importantes la pérdida de alimentos por rotura de la cadena de frío, daños a sistemas de climatización y la interrupción de actividades dependientes de electricidad.